No pensaba incluir el asunto de los caramelos envenenados en la serie sobre "la primavera trágica del 36."
Mi plan inicial era pasar directamente del entierro de Anastasio de los Reyes al asesinato del Teniente Castillo. Finalmente me he decidido a incluir el suceso de los caramelos, porque lo considero una muestra palmaria de la epilepsia que padecía la sociedad española un mes y medio antes de que se abriera la veda.